- Interpreta la Orquesta de Cámara de la Universidad Michoacana y el cuarteto de Guitarras Tetraktys en el teatro Ocampo.
Un merecido reconocimiento para Leo Brouwer, recibió por parte del rector de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, Medardo Serna González y del secretario de Cultura de Michoacán, Salvador Ginori Lozano, luego de que se estrenara en el país su reciente obra “Concierto itálico” en el teatro Ocampo de esta ciudad.
En el marco CDLI Aniversario Luctuoso de Don Vasco de Quiroga, la Orquesta de Cámara de la Universidad Michoacana (OCUM), incluyó en lo que fue su quinto concierto de la temporada, el “Concierto itálico para cuarteto de guitarras y orquesta” de Leo Brouwer, interpretada bellamente por el Cuarteto de Guitarras Tetraktys y la OCUM.
Esta obra fue escrita en el 2001 para el cuarteto GuitaArt y estrenada el mismo año en Italia, bajo la dirección de su autor. Ahora fue estrenada en México en el teatro Ocampo, lo cual mereció un lleno total del teatro y el reconocimiento de la Universidad Michoacana para su autor, quien además de componer es guitarrista y director de orquesta.
Al concierto asistieron varios funcionarios de la Universidad Michoacana así como pertenecientes a la Secretaría de Cultura de Michoacán y público en general, quienes además pudieron disfrutar de otras piezas musicales dentro del programa.
El descendimiento según Rembrandt, de Ramón Montes de Oca (1953- 2006), cuya producción incluye principalmente música para instrumentos solistas y de cámara, y ha sido interpretada fuera de nuestro país en Argentina, Canadá, los Estados Unidos y Polonia, habiéndose grabado para la radio y discos. El descendimiento según Rembrandt para cuerdas fue escrita en 1991, en relación con la obra de 1633 del pintor holandés sobre Jesús, al ser bajado de la cruz.
En la segunda parte, la OCUM interpretó el concierto con la obra Fin Milenio, de Gabriel Rojas, para cerrar con el Concierto en la mayor F.XI, No.4 de Antonio Vivaldi.
Juan Leovigildo Brouwer Mezquida, mejor conocido como Leo Brower, es compositor y guitarrista de origen cubano. Inició sus estudios de música con Caridad Mesquida, solfeo y teoría (estas asignaturas las examinó en 1955 en el Conservatorio Carlos A. Peyrellade), y guitarra, con su padre Juan Brouwer; concluyó el estudio del instrumento con Isaac Nicola.
Completó su formación en la Juilliard School of Music, de Nueva York, donde fue discípulo de orquestación y composición de Vincent Persichetti y J. Diemente; de Richard Bennett, dirección coral; alumno-oyente de las clases de orquestación de Jean Morell, y Stefan Wolpe.
Debutó profesionalmente el 22 de julio de 1955 en un recital organizado por las Juventudes Musicales de Cuba, efectuado en el Lyceum Lawn and Tennis Club. En 1956 se vinculó al Cine Club Visión, sociedad integrada por jóvenes amantes del arte, que reunió no sólo a cineastas, sino también a músicos, teatristas, pintores y críticos.
En 1957 se une al trabajo que realizaba la Sociedad Cultural Nuestro Tiempo y al grupo de teatro Los Juglares e hizo su primer concierto con una orquesta sinfónica: la Orquesta CMQ, dirigida por Enrique González Mántici, en el cual interpretó el Concierto para guitarra y orquesta del compositor nicaragüense Luis Delgadillo. Este mismo año actuó en la Galería de Artes Plásticas de Santiago de Cuba.
Como compositor, su primera obra data de 1956: Preludio, pieza muy significativa porque el autor, sin proponérselo y sin haber tenido la referencia muy madura, logra un contrapunto del tres criollo, que no manejaba a fondo sino simplemente como referencia, por cuanto el conocimiento no le venía por línea directa.
Aún cuando su cultura no fue popular de raíz, en sus obras siempre están presentes los elementos populares, hasta en las más elaboradas, quizás precisamente por la distancia. Con sus obras, Leo Brouwer ha demostrado en qué medida ha ido incorporando sus visiones, sus vivencias, su cultura histórico-musical, con la raíz misma de su modo de hacer compositivo, lo que le permite decir: “aunque mis pies hayan estado rodando por el mundo mi pensamiento está nutrido de la cultura cubana”.