- Máxima distinción que otorga el Congreso del Estado de Michoacán, a personas o instituciones que se distingan por su aporte a la sociedad en materia de servicio o cultura.
En sesión solemne y con la presencia del gobernador del Estado, Silvano Aureoles Conejo y el presidente del Supremo Tribunal de Justicia, Marco Antonio Torres Negrete, la Facultad de Ciencias Médicas y Biológicas “Dr. Ignacio Chávez” recibió la presea Melchor Ocampo 2016, otorgada por parte de la LXXIII Legislatura del Congreso de Michoacán.
Alumnos, profesores, funcionarios universitarios, ex rectores, directores y alumnos de la Facultad de Ciencias Médicas y Biológicas, así como el secretario general del Sindicato de Profesores de la Universidad Michoacana, Gaudencio Anaya Sánchez, todos ellos presididos por el rector Medardo Serna González, fueron testigos presenciales de esta distinción hacia una de las facultades más antiguas de la Casa de Hidalgo.
Durante la reseña que se hiciera en el recinto legislativo sobre la Facultad de Medicina, se recordó que su origen fue el procurar para los michoacanos médicos que pudieran atender las enfermedades endémicas que prevalecían en la época.
De entonces a la fecha, aseveró en su oportunidad el diputado Pascual Sigala Páez a nombre de la LXXIII Legislatura, son miles los médicos e investigadores que ha forjado para la sociedad la Facultad de Ciencias Médicas y Biológicas “Dr. Ignacio Chávez”, quienes han servido de manera altruista a la sociedad y a la nación.
Melchor Ocampo vive a través de sus aportaciones que sirvieron como base a la Constitución Política de México; a su visión de la necesaria separación Estado – Iglesia y su interés por la educación como principal herramienta para lograr una sociedad democrática y libre.
La mejor forma de honrar su memoria, observó, es lograr un mejor Michoacán para las presentes y futuras generaciones, con el propósito de analizar y transformar lo que sea necesario para que nuestra sociedad avance con unidad.
En ese tenor recordó la necesidad de la entrega de una propuesta por parte del H. Consejo Universitario de la Casa de Estudios al Congreso del Estado, de reforma a su Ley Orgánica, la cual le permita ser reconocida como una universidad regional, con el consecuente soporte presupuestal para que la Universidad Michoacana cumpla cabalmente con su labor formadora y de investigación.
Al recibir la presea Melchor Ocampo de manos del gobernador del Estado, la directora de la Facultad, Silvia Hernández Capi, manifestó el orgullo de recibirla y el compromiso que implica para la institución, por mantenerse a la altura de dicha distinción, en seguimiento a los objetivos para los cuales fue creada hace 186 años.
Vengo a este recinto, dijo en tribuna, en representación de la Facultad de Ciencias Médicas y Biológicas “Dr. Ignacio Chávez” dependiente de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, situación que desde luego trae consigo satisfacción por el reconocimiento al esfuerzo realizado, pero también con un sentimiento de profundo compromiso para justificar dicha distinción por el pasado, presente y futuro de la Facultad.
Sin duda, expresó Hernández Capi, la Facultad cuenta con una gran historia de educación y trabajo social a favor del pueblo de Michoacán, al recibir en sus aulas alumnos de todo el país, con lo que refrenda su espíritu de universalidad, característica que distingue a la Casa de Hidalgo. La condecoración Melchor Ocampo consiste en una medalla circular fabricada en oro de 18 kilates, en cuyo anverso se muestra una efigie de Don Melchor Ocampo y el nombre de quien la recibe, mientras que al reverso ostenta el escudo del estado de Michoacán.
Cada año durante el mes de diciembre los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, así como los ayuntamientos y universidades en Michoacán proponen personas o instituciones candidatas a recibir la condecoración, misma que desde 1999 se entrega el 3 de junio, fecha del aniversario luctuoso de Don Melchor Ocampo.
En esta ocasión, la Facultad de Ciencias Médicas y Biológicas “Dr. Ignacio Chávez”, recibió la presea junto con el grupo musical terracalenteño Hermanos Jiménez y su Arpa, cuyo fundador, durante 44 años de trayectoria, dio vida al legado de su padre Francisco Jiménez García, oriundo de la comunidad de El Ceñidor, municipio de Múgica, Michoacán.
Jiménez García es reconocido como el mejor arpero de Michoacán, iniciador de una técnica única en la interpretación del arpa, difundiendo los sones y balonas de Tierra Caliente, en el país, Estados Unidos y Centroamérica.
